¿No les pasa que llega un momento en la vida en el que empiezan a cuestionarse cosas que antes daban por seguras? Como si, de repente, todas esas creencias que nos sostuvieron por años ya no encajaron del todo.
Hay momentos en la vida en los que las certezas con las que crecimos comienzan a desmoronarse. Lo que antes parecía inamovible —nuestra fe, nuestras creencias, la idea de lo que significa ser una "buena mujer"— de repente se siente extraño, incómodo, incluso ajeno.
A mí me pasó. Y todavía me pasa.
Me he encontrado preguntándome cosas que antes ni se me habrían cruzado por la cabeza: ¿Por qué creo lo que creo? ¿De verdad quiero seguir este camino o simplemente lo sigo porque "así debe ser"? ¿Cuánto de mi vida está construida sobre ideas que nunca me tomé el tiempo de cuestionar?
¿Alguna vez han sentido esto?
Escucha este episodio del podcast, 𝗘𝗡 𝗗𝗘𝗙𝗘𝗡𝗦𝗔 𝗣𝗥𝗢𝗣𝗜𝗔 habla de temas muy interesantes. Y este capítulo uuff!... me he vuelto fan!
El Momento En El Que Todo Se Cuestiona
El Punto de Quiebre: Cuando la Duda Se Hace Presente Muchas veces, el proceso de cuestionamiento no llega de golpe, sino que empieza con pequeñas grietas en nuestra percepción del mundo.
Como una crisis personal, una decepción profunda o simplemente el cansancio de vivir en automático.
"Siempre pensé que si seguía las reglas todo saldría bien, pero me di cuenta de que estaba profundamente insatisfecha, aunque había hecho todo "como debía".
No sé si les ha pasado, pero se siente una sensación incómoda, como un pequeño ruido de fondo que te dice: “Esto no me hace feliz”.
En mi caso, fue un momento de silencio en el que me pregunto: “¿Realmente quiero esto para mí?”
¿Qué fue lo que les hizo empezar a cuestionarse ustedes?🤔
Cuando Empezamos a Ver la Vida con Otros Ojos
A veces nos aferramos tanto a nuestras creencias porque sentimos que sin ellas no sabríamos quiénes somos. ¿Pero qué pasa cuando lo que creíamos cierto ya no nos hace sentido?
Yo crecí pensando que si hacía todo “bien”, la vida me recompensaría con felicidad y estabilidad. Pero me di cuenta de que seguía todas las reglas y, aún así, me sentí perdida.
¿Les ha pasado? ¿Ese momento en el que algo dentro de ustedes dice: “Tal vez hay otra forma de vivir”?
El Miedo a Perderse… y la Posibilidad de Encontrarse
Lo más difícil de cuestionarnos es la sensación de estar flotando en la incertidumbre. Como si de repente hubiéramos soltado todas las respuestas sin tener nuevas a las que aferrarnos.
Me pregunto: “Si dejo de creer en esto, ¿entonces en qué creo? ¿Quién soy si ya no soy la persona que seguía estas reglas?”
Es aterrador. Pero al mismo tiempo, es la mayor oportunidad de nuestras vidas.
Porque cuando dejamos ir lo que ya no nos hace bien, empezamos a construir desde un lugar más real.
¿Cómo Rediseñar mi Vida desde Cero? (La pregunta del millón de dólares)
No tengo todas las respuestas, pero algo que me ha ayudado en este proceso es permitirme hacerme preguntas sin miedo:
- ¿Qué de todo lo que creo sigue resonando conmigo?
- ¿Qué cosas hago por costumbre y no porque realmente las quiero?
- Si pudiera diseñar mi vida sin presiones externas, ¿cómo se vería?
Tal vez nunca tengamos certezas absolutas, pero ¿qué pasaría si nos diéramos permiso para cambiar de opinión?
La libertad de ser quien realmente somos.
Al final, este proceso es un regreso a mi misma.
Es dejar de vivir en automático, soltar expectativas que no son mías y atreverme a ser quien realmente quiero ser.
Y sí, es un camino largo. Pero creo que es el único en el que realmente podemos sentirnos libres.
No hay nada más valiente que atreverse a cuestionar. Porque aunque nos de miedo soltar lo conocido, lo que nos espera del otro lado es algo aún más poderoso: ganas confianza, nuevas oportunidades y una versión más fuerte de ti misma.
¿Les ha pasado algo así últimamente? Me encantaría leerlas.